ROSCOS DE VINO

Hay muchas cosas que me gustan de la cocina y de cocinar. Quizás el vínculo que hay entre las fiestas y la gastronomía sea una de las que más me atraen. No hay fecha importante del calendario que no tenga una receta para acompañar…Carnaval, Pascual, San Juan, Difuntos…Navidad!!

Otra cosa que me agrada es saber que es constante y sucesivo. O sea, que las recetas que no me dé tiempo a experimentar este año las puedo guardar para intentarlo el año que viene. Es como una segunda oportunidad pero con muchos intentos. Así se pueden ir afinando las recetas sin aburrir a nuestros comensales.

Obviamente las editoriales se hacen cargo de esta situación y llegado el mes de noviembre publican los especiales de Navidad que tanto me gustan! La revista Thermomix Magazine en su nº 38 ha hecho lo propio y entre la cantidad de recetas típicas de estas fiestas están estos Roscos de Vino.

A mi madre le faltó tiempo para hacer la receta y, aún sin haberse enfriado los roscos, me llamó para comentarme lo fácil que eran y lo bien que se trabajaba la masa. También me comentó que a la Thermomix le costó un poco amasarla (aún no sabemos si es por la manteca de cerdo o por el peso de los ingredientes), así que me recomendó que intentara hacer la receta con mi KitchenAid nueva.

Obviamente acepté este pequeño reto y el resultado es el esperado. Una receta sencilla, con una masa muy manejable y que además es rápida de hacer. Ideal para sorprender a la familia o para regalar!

INGREDIENTES:

310 g de harina de fuerza
310 g de harina de repostería
100 g de avellanas peladas y tostadas
200 g de azúcar glas (80 g serán para decorar)
250 g de manteca de cerdo
½ cucharadita (tsp) de canela molida
250 g de vino de Málaga

PREPARACIÓN CON KITCHENAID:

Lo primero que hay que hacer es tostar las harinas, este proceso nos llevará unos 35 minutos. Para ello habrá que mezclarlas y ponerlas en una bandeja del horno previamente forrada con un papel de hornear o similar. Introducir la bandeja en el horno, ya precalentado, a 150º sin aire ni turbo. A los 15 minutos abrir el horno y remover, con una cuchara, la harina. La operación tiene que ser rápida para que el horno no pierda calor. Seguramente se habrá compactado y estará dura. Puede que se hagan pequeñas bolas como si fueran grumos duros pero no hay de que preocuparse.

Pasados 10 minutos hay que volver a remover con la cuchara.

Y pasado otros 10 minutos hay que volver a remover y mirar si la harina ha cogido color. Tiene que estar de color amarillo tirando a marrón clarito.

Sacar la bandeja del horno y dejar enfriar completamente. Yo he tostado las harinas la víspera, así me he asegurado de que estuviera fría.

Al día siguiente precalentar el horno a 160º. Triturar las avellanas y ponerlas en el cuenco de la KithenAid, añadir la harina tostada y tamizada, 120 g de azúcar glas, la manteca de cerdo cortada en dados, la canela y el vino de Málaga. Mezclar con la pala durante unos segundos a velocidad 2

y después durante 1 minuto a velocidad 4. Al terminar tendremos una masa muy manejable.

Retirarla del cuenco sobre un papel de hornear. Colocarle otro encima y estirar la masa con un rodillo hasta alcanzar 1 cm de grosor.

Con dos cortadores circulares de galletas recortar la masa y colocar los roscos en una bandeja del horno forrada con papel de hornear o similar.

Los recortes se pueden reutilizar juntándolos y formando una bola. Después hay que estirarlos como se hizo anteriormente y volver a cortar utilizando los cortadores. Yo he usado uno grande de 68 mm de circunferencia y otro pequeño de 38mm para hacer el agujero del centro.

Una vez tengamos los roscos recortados, introducirlos en el horno durante 15-20 minutos. Sabremos que están listos cuando tengan un ligero color dorado.

Retirarlos del horno y pasarlos a una rejilla para que se enfríen, con cuidado de no quemarse!

Poner un trozo de papel de hornear debajo de la rejilla. Esparcir el azúcar glas, reservado para la decoración, usando un colador o tamiz para que caiga en cascada y quede la cobertura más homogénea. El azúcar que se haya depositado sobre el papel de hornear se puede reciclar.

PREPARACIÓN CON THERMOMIX:

El proceso es igual al anterior. Aprovecharemos nuestra máquina favorita para triturar las avellanas 5 segundos, velocidad progresiva 5-10.

Se incorporan todos los ingredientes y se amasa durante 30 segundos a velocidad 6.

SUGERENCIAS:

Los roscos de vino, normalmente, se presentan envueltos en papel de seda. Yo he utilizado un pliego de color rojo pero los hay de todos los colores, podéis utilizar el que más os guste.