GALLETAS DE QUESO

¡Estas galletitas de queso son un vicio!

Una cena improvisada, un picnic en el campo, una merienda de cumpleaños…la verdad es que son ideales para cualquier ocasión. Aunque no hace falta ningún pretexto para tomarlas porque son tan fáciles de hacer que hasta los principiante se puede atrever con ellas.


Se pueden servir solas o con cualquier fiambre pero su pareja ideal es, sin duda, la mermelada de tomate casera.

¿Qué os puedo decir de esta mermelada?

Sólo que tenéis que probarla porque su toque dulce y delicado es perfecto para estas galletitas crujientes…claro que siempre hay quien prefiere comérsela a cucharadas!

La receta la he visto en el blog Bocados de cielo y seguro que no será la última receta que comparta porque tiene pequeñas joyas.

¡Vamos a por la receta!

INGREDIENTES

• 150 g de mantequilla a temperatura ambiente
• 100 g de queso semicurado rallado
• 150 g de harina de trigo
• 2 cucharas soperas de agua mineral
• 1 pellizco de sal
• Pimienta negra recién molida

PREPARACIÓN TRADICIONAL

Hacer un volcán con la harina de trigo. En el hueco poner la mantequilla, el queso rallado, el agua y la sal. Amasar primero con los dedos y después con toda la mano hasta que se vuelva una masa compacta. En cuanto adquiera el punto hay que dejar de amasar y no hacerlo en exceso.

Cortar un trozo de film transparente lo suficientemente grande como para envolver la masa y formar una bola.

Dejarla enfriar en la nevera durante 30 minutos.

Una vez fría estirar la masa entre dos trozos de papel de hornear o film transparente hasta conseguir un grosor de 5 mm.

Cortar la masa con un cortador de galletas. Yo he utilizado uno lobulado de 58 mm de circunferencia.

Colocar las galletas en bandejas para el horno, no hace falta ponerles papel porque se despegan bien. Dejarlas reposar otros 30 minutos en la nevera para que después no se deformen.

Mientras precalentar el horno a 180º. Transcurrido el tiempo espolvorearlas la pimienta recién molida y hornear las galletas por tandas en la altura media del horno. Sacar del horno a los 15 minutos o cuando los bordes se empiecen a tostar.

Dejar reposar las galletas hasta que estén templadas.

Después pasarlas con cuidado a una rejilla para que se acaben de enfriar.

Repetir la operación hasta tener todas las galletas horneadas.

PREPARACIÓN CON THERMOMIX

Poner todos los ingredientes en el vaso, mezclar durante 7 segundos a velocidad 6.

Cortar un trozo de film transparente lo suficientemente grande como para envolver la masa y formar una bola.

Dejarla enfriar en la nevera durante 30 minutos.

Una vez fría estirar la masa entre dos trozos de papel de hornear o film transparente hasta conseguir un grosor de 5 mm.

Cortar la masa con un cortador de galletas. Yo he utilizado uno lobulado de 58 mm de circunferencia.

Colocar las galletas en bandejas para el horno, no hace falta ponerles papel porque se despegan bien. Dejarlas reposar otros 30 minutos en la nevera para que después no se deformen.

Mientras precalentar el horno a 180º. Transcurrido el tiempo espolvorearlas la pimienta recién molida y hornear las galletas por tandas en la altura media del horno. Sacar del horno a los 15 minutos o cuando los bordes se empiecen a tostar.

Dejar reposar las galletas hasta que estén templadas. 

Después pasarlas con cuidado a una rejilla para que se acaben de enfriar. 

Repetir la operación hasta tener todas las galletas horneadas.

SUGERENCIAS

Son las típicas galletas que se consumen rápido porque sirven para acompañar cualquier plato, aun así aguantan bien unos días en un recipiente hermético pero no las guardéis hasta que estén totalmente frías de lo contrario se condensará la humedad y se echarán a perder.

Más información – Rincón Gourmet